diciembre 2, 2018

Recuerdos y emociones, unidos para siempre

Como os hemos contado esta semana, las emociones tienen mucho que ver con nuestros recuerdos. Si este recuerdo es significativo o relevante para nosotros, se quedará grabado; pero si no lo es, lo olvidaremos. Recuperaremos recuerdos positivos cuando nuestro estado de ánimo sea positivo, y los negativos, cuando las emociones que sintamos sean negativas.

Cuanto más intensa sea la emoción, mejor recordaremos ese hecho o acontecimiento y, aunque haya pasado mucho tiempo, el recuerdo quedará adherido en nuestra memoria.


Tanto si el recuerdo es positivo como si es negativo, tenemos que entender que forma parte de nosotros. No debemos intentar olvidar aquello que no ha sido tan positivo para nosotros. Tenemos que aprender a vivir con ello, aprender a aceptar que, por muy negativo que pueda ser un recuerdo, siempre nos puede enseñar algo que nos sirva para seguir adelante con nuestras vidas.

Recordar es indispensable para comprender muchas de las situaciones que nos suceden en la vida, y para superar otras. Los recuerdos nos sirven para tomar decisiones y reaccionar de manera coherente ante diferentes situaciones; también ayudan a mantener vivo en el tiempo aquello que ha sido importante para nosotros, creando nuestra propia identidad.

 

Financiado por el Programa Kit Digital. Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España «Next Generation EU»
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